Chiste 0410 - La vela

La Señora Ortiz caminaba por la calle Poniente en Antigua, Guatemala, y en dirección opuesta estaba el padre Álvarez viniendo de La Iglesia de La Merced. "Hola", dijo el padre, "¿Cómo está, Señora Ortiz? ¿No realicé la ceremonia de matrimonio para usted hace dos años?"

Ella le respondió: "Lo hizo, padre".

El sacerdote le preguntó: "¿Cómo está tu esposo? ¿Dónde está?

"Él está bien. Ahora, está en su trabajo" ella le contestó.

¿Y ya hay algunos pequeños?" le preguntó el sacerdote.

"No, todavía no padre", le dijo ella.

"Voy a ir a Roma la próxima semana y le encenderé una vela" le dijo el sacerdote.

"Gracias Padre." le dijo y ella se fue.

Unos años más tarde se encontraron de nuevo en la calle. "Hola, señora Ortiz", dijo el Padre, "¿cómo está?"

"Hola, Padre. Estoy bien, gracias", le dijo ella.

"¿Ya tiene niños?" le contestó el sacerdote.

"Sí, padre. Hemos tenido tres parejas de gemelos y cuatro más, diez en total" ella le contestó.

"Es tan maravilloso", le dijo el sacerdote, "¿Y cómo está tu adorable esposo? ¿Dónde está?"

"Él está bien. le dijo ella, "Se fue a Roma ¡para apagar la maldita vela!"